Indicador: Tasa de participación económica
Definición: Mide el grado de participación de la población en el mercado de trabajo.
Cálculo: Cociente entre la población económicamente activa (definida como las personas que trabajan o buscan trabajo) de 15 años y más y la población total de 15 años y más, multiplicado por 100.
Interpretación estadística: Un valor de 60 significa que un 60% de la población adulta (de 15 y más años de edad) está inserta en la actividad económica, ya sea trabajando o buscando trabajo.
Desagregación por edades: Edades, 15-24; 25-34; 35-44; 45-59; 60 y más; por sexo; urbano-rural.
Interpretación contextual y pertinencia: En general, los indicadores socioeconómicos responden a parámetros convencionales del trabajo en sociedades orientadas al mercado y no necesariamente son pertinentes para comprender la economía y el bienestar de los pueblos indígenas. Estos pueblos tradicionalmente han desarrollado economías colectivas y familiares, basadas en la reciprocidad y orientadas principalmente a la subsistencia, no así a la acumulación de capital; asimismo, todos los miembros del grupo familiar aportan en la producción de los bienes. A modo ilustrativo, el censo indígena de Paraguay (2002) revela que en un 76% de las viviendas se realizan habitualmente actividades de cultivo, y en la gran mayoría de estos casos es únicamente para el consumo propio (aunque claro está, también realizan otras actividades con valor económico en el mercado). Los resultados de este indicador deben interpretarse con precaución, sobre todo los correspondientes a las zonas rurales; en las zonas urbanas presentaría menos problemas, aunque no se pueden descartar las lógicas indígenas.
Observaciones: Existe un sesgo generalizado de subestimación del trabajo femenino, sobre todo del trabajo informal o aquel que se realiza en el hogar. Además de las consideraciones previas, en el caso de las mujeres indígenas la subestimación podría ser aún mayor, ya que no existiría la distinción entre las actividades productivas y reproductivas. A modo ilustrativo, en base a la preguntas convencionales para medir la población económicamente activa (PEA) incluidas en el censo indígena de la República Bolivariana de Venezuela –aplicado solamente en comunidades indígenas rurales-, se obtiene una PEA de tan sólo un 23,1%. Este censo incluye, además, un conjunto de preguntas sobre actividades habituales, como cría de animales, confección de artesanías, etc., identificando si estas actividades se realizan únicamente para el consumo, únicamente para la venta, o ambas situaciones. Luego, si se suman aquellos casos en que las actividades incluyen la venta, la PEA asciende al 42,6% (se constató que parte de la población indígena que respondía afirmativamente a este conjunto de preguntas, había declarado que no trabajaba ni tenía trabajo). Haciendo este ejercicio por sexo, se corroboró que en el caso de las mujeres indígenas, la subestimación era aún mayor.
Notas adicionales sobre el procesamiento censal: Los indicadores consignados corresponden a la población de 15 años y más de edad (límite mínimo comparable para todos los censos procesados). No se incluye a la población con actividad laboral ignorada.
La población económicamente activa se contabiliza a partir de la/s pregunta/s que identifica/n si la persona tiene trabajo más aquellas que buscan trabajo. En los casos de Ecuador y de la República Bolivariana de Venezuela se agregan, además, las situaciones que se detallan a continuación.
Ecuador (2001): incluye, además, a las personas que durante la semana anterior al censo declaran no haber trabajado, pero realizaron o ayudaron a realizar alguna actividad aunque la misma fuera sin remuneración (pregunta 19 del cuestionario censal).
Rep. Bolivariana de Venezuela (2001): incluye, además, a las personas captadas en el censo de comunidades indígenas, que informan realizar habitualmente cualquiera de las siguientes actividades: caza, pesca, agricultura, cría de animales, recolección, artesanía y minería (opciones 1 a 7 de pregunta 34 del cuestionario censal), para el consumo familiar y la venta, o sólo para la venta (categorías 2 y 3 de cada una de las opciones de la pregunta mencionada). Asimismo, se incluye como PEA a todas las personas que dicen realizar cualquiera de las actividades anteriores, para consumo familiar (categoría 1 de las opciones 1 a 7 de pregunta 34), pero que declaran que durante la semana anterior al censo realizaron en su casa o fuera de ella, alguna actividad pagada en dinero o en especie (categoría 1 de la pregunta 30 del cuestionario censal).
Panamá (2000): No incluye personas residentes en el extranjero que al momento del censo estaban en este país (las características económicas no son captadas para estas personas).
Volver a Participación en la Economía Formal